Reserva un espacio para el esparcimiento

Cuando todo el mundo trabaja desde casa, hay menos margen para las interacciones sociales que contribuyen en gran medida a crear un equipo sólido. Eso significa que es más importante que nunca tratar de llevar el chat más allá del trabajo durante el día y no instar a los equipos a trabajar constantemente sin los descansos y el tiempo de inactividad que habrían disfrutado cuando estaban en la oficina.

Hay una serie de tácticas que pueden funcionar: reunir a dos empleados y concederles un tiempo dedicado a charlar cada semana sobre un interés común; celebrar un evento social virtual semanal utilizando tecnología de videoconferencia, idealmente durante el horario de oficina para que el personal no se sienta resentido por el hecho de que el trabajo se extienda a la vida familiar; y fomentar activamente el uso de canales no laborales en tu plataforma de trabajo a distancia. Esto último es vital: compartir anécdotas en las redes sociales e intercambiar chistes en línea puede ser un práctico sustituto de pasar unos minutos juntos alrededor del refrigerador de agua o en la cocina del personal.